EL Dr. Antonio Facal García lleva 42 años de profesión orientando su investigación y trabajo a los problemas de los más pequeños. Ha dedicado su vida al estudio del desarrollo de la cara y los huesos maxilares. De este modo se ha convertido en uno de los expertos con mayor conocimiento de esta especialidad a nivel mundial. Cree en la prevención y corrección de las irregularidades dentales desde temprana edad.
En la Clínica Facal Ortodoncia somos EXPERTOS EN ORTODONCIA INFANTIL. Los años de profesión dedicados a la ortodoncia infantil, los casos tratados con éxito, la experiencia y la tecnología de la que se dispone para el éxito de los tratamientos hace que sigamos siendo un referente en esta especialidad.
Control del Desarrollo Facial durante el crecimiento del niño.
El crecimiento de todo el cuerpo está predeterminado genéticamente, pero el desarrollo de cada uno de sus órganos se potencia o se atrofia dependiendo de su grado de función.
Para el normal desarrollo de su cara, el niño debe crecer con la boca habitualmente cerrada durante el día e incluso mientras duerme. Y para ello, es imprescindible una función aceptable tanto de la respiración nasal como de la masticación, que debe ser fuerte y simétrica.
- Si no respira bien, abrirá la boca y, con el paso del tiempo, su cara se alargará y se estrechará progresivamente, alejándose cada vez más de su diseño genético que hasta entonces era perfecto. Por eso, tendremos muy en cuenta las amígdalas, vegetaciones, alergias, catarros… etc.
- Si no mastica bien, estará más cómodo con la boca abierta y el desarrollo facial se alterará de manera similar al de los malos respiradores. Tanto las caries, como las interferencias debidas a unos dientes mal ajustados estimulan una postura mandibular de boca abierta, que el niño adopta como defensa ante la desagradable o dolorosa sensación que se produce cada vez que aprieta sus dientes.
El alargamiento de la cara, debido a una postura mantenida de boca abierta, agrava el pronóstico de otras desviaciones del desarrollo de la mandíbula inferior, que puede quedarse corta, o excesivamente grande, o desviarse hacia un lado. Lo que, en lenguaje odontológico se llama “Clase II esquelética”, “Clase III esquelética” y “Mordida cruzada unilateral”.
En todos estos casos es necesario aplicar un tratamiento lo más precozmente posible, ya que todos estos problemas tienden a empeorar y, cuanto más se demore el tratamiento, más difícil se hará su recuperación.
El tratamiento preventivo de ortodoncia, siempre simple, corto y eficaz, se hace a partir de los cuatro años de edad y está principalmente encaminado a diagnosticar y suprimir las alteraciones funcionales de la masticación, que puedan desviar el desarrollo de la cara del niño de su diseño genético.